AVATAR de James Cameron
Argumento patético y simple, con personajes planos, lleno de tópicos y varios plagios unidos. Todo eso maquillado con efectos visuales y una “revolucionaria” tecnología 3-D.
En primer lugar, debo decir que lo siento mucho por aquellos que les gustó Avatar, que seguro que sois la gran mayoría. En ningún momento quiero ofender a nadie con mis opiniones. Solo quiero dar mi crítica personal, que quizá sirva a alguien para ver más allá de la espectacularidad de sus imágenes.
Cuando uno entra al cine a ver la supuestamente innovadora cinta que James Cameron lleva preparando desde que termino Titanic, allá por 1997, piensa que va a ver algo asombroso, algo espectacular, una historia maravillosa llena de efectos especiales y mucha belleza visual. Pero sales de la sala muy decepcionado, te das cuenta de que lo único innovador son los efectos especiales y que tan solo acabas de ver un desfile de recursos visuales creados simplemente para disimular la mediocridad del film.
Las alabanzas que puedo hacer al film son muchas (Únicamente viendo la película en 3-D).
Los efectos visuales son realmente asombros, el hecho de verte sumergido en ese mundo es maravilloso y el empleo del 3-D resulta más que acertado.
A mi, particularmente, no me gusta nada la naturaleza. Odio el campo, los árboles, las plantas, el sol, los bichos, los animales y demás, pero James Cameron en Avatar consigue que todo eso se vea bonito y que a lo largo del film te sientas a gusto dentro de ese mundo mágico. Yo mismo que amo los paisajes grises, edificios altos, coches, humo y contaminación estaba fascinado con esa selva donde viven los Navi. Pero hasta aquí lo bueno.
Si miramos mas allá del espectáculo visual nos encontramos una película mediocre, una historia simple y predecible con unos personajes planos y excesivamente simples. Están el bueno, el malo malísimo, la chica que se enamora del bueno… Ese tipo de personajes “sin vida propia” que desfilan ante nuestros ojos como meras marionetas de cartón piedra, que estaban muy bien en los cuentos que nos contaban en nuestra infancia. Nuestra cabeza, aun en desarrollo, no podía concebir unos personajes más complejos. Pero el público de dicha película tiene ya cierta edad y estas cosas ya no cuelan. A las personas que les ha gustado el film suelen achacar que eso es bueno para que llegue a todos los públicos… ¿Todos los públicos? ¿Una película en la que mueren cientos de personas es para todos los públicos? Yo mismo me he sorprendido “alegrándome” de que murieran seres humanos, imagínate un niño pequeño… Incluso una persona entre el publico (desconozco si era hombre, mujer o niño) ha aplaudido cuando a muerto una persona… es el malo, si, pero… al fin y el cabo, no deja de ser un ser humano.
A lo que quiero llegar es que en absoluto es una película “para todos los públicos” a si que en absoluto están justificados unos personajes tan simplones…
Todo en la película esta hecho única y exclusivamente para “gustar” y hacerse los guays y los super-ecologistas. Como no, para dar pena, el protagonista tenia que ser un Marine tullido (tipico yanqui). Así poder tocar las fibras de los espectadores más simples para que piensen algo asi como:
“Oh, pobrecito ahora no puede ser militar porque se ha quedado invalido por servir a la patria. Es un autentico héroe”
Y más tarde que la gente se alegre cuando entra en su cuerpo de Avatar y piensen:
“Que bien, ahora se siente libre y puede correr por el campo”
A la gente que lamentablemente ha quedado parapléjica no hay que tenerle lastima, hay que tenerles respeto, como a cualquier otro ser humano. Y James Cameron quiere que sintamos lastima por el, que lloremos por su discapacidad. El hecho de que el marine renuncie a su cuerpo y prefiera ser un Navi, ¿es un buen ejemplo para los niños que están en silla de ruedas?
La película también intenta mostrar un “rollo” ecologista que esta muy trillado. Todo ese mensaje simple tantas y tantas veces repetido de que hay que cuidar el medio ambiente e incluso llegar a decir en el film que “En la tierra no queda nada de verde” me parece un mensaje muy simple, tópico y superficial.
Tampoco entiendo esa supuesta “historia de amor” ya que los personajes no mantienen una sola conversación real y profunda entre ellos donde puedan conectar y enamorarse en todo el film. Es más, dichos personajes como ya he dicho unas líneas más arriba son planos, nada profundos y totalmente vacíos a si que a mi juicio ahí no hay amor. Me da la sensación de que al marine le morbillo que sea una indígena azul de otro planeta y se haya echo sus pajas mentales. Al igual que la película su amor entra por los ojos y no por el corazón como nos hacen creer. Solo parecen dos de esos adolescentes de hoy en día que se enamoran del exterior y no del interior, y no les culpo porque al igual que los personajes del film no existe tal interior.
Todo esto citado más arriba tendría su perdón si no fuera (para colmo) un plagio. Digo un plagio por decir, porque en realidad son varios plagios. A las pruebas me remito:
Un plagio de Pocahontas:
(Esta en ingles pero se entiende perfectamente, sobretodo si has visto la pelicula)
Plagio de un libro ruso:
La organización Comunistas de San Petersburgo ha exigido el arresto del cineasta canadiense James Cameron, al que acusan de haber robado ideas de la ciencia ficción soviética para su nueva película Avatar.
“Consideramos que la película Avatar es un robo elemental, una apropiación de la propiedad intelectual socialista, de la colección de libros y películas de la ciencia ficción soviética. En cualquier país semejantes actos están contemplados en el código penal”, señala la organización.
Exigen que la fiscalía rusa dicte una orden internacional de captura contra Cameron, “quien se ha apropiado de todos los héroes, ideas y, en general, de toda la vida en Pandora (planeta que figura en diversos libros de ciencia ficción y en el que Cameron sitúa su película) y se la regaló a un robot paracaidista loco”.
(Fuente: Internet)
Plagio de un relato de Poul Anderson titulado “Call Me Joe”
‘Call Me Joe’ se centra en la vida de un parapléjico, de nombre Ed. Anglesey, que conecta telepáticamente con una forma de vida artificial creada con el fin de explorar un planeta inhóspito (en este caso, Júpiter).
Anglesey, como ocurre con el ‘Avatar’ de Jake Sully (Sam Worthington), se deleita en la libertad y la fuerza de su cuerpo creado artificialmente, en las batallas depredadoras en la superficie de Júpiter, y poco a poco se vuelve nativo cuanto más tiempo pasa conectado a ese cuerpo.
Se parece un huevo, sí. Pero es que, además, una de las portadas que se utilizaron para la publicación de la referida historia corta representa a Anglesey como una criatura gigante, de color azul, con aspecto de gato y con una lanza.
(Fuente “canaltcm.com”)
Plagio “Delgo”:
Las imágenes que os mostramos a continuación son un ejemplo claro de la similitud escenográfica de ambas cintas. ¿Casualidad? Se avecinan demandas...
(Fuente: Internet)
Plagio del comic “Timespirits” de 1984:
Compara algunas imágenes del comic con fotogramas del film. Recuerda que el comic es 25 años más antiguo que el film de Cameron.
(Fuente: Internet)
¿Qué más se puede decir?, sobran las palabras… Y no tengo nada en contra de Cameron, es mas, gracias a el me empecé a interesar por el cine cuando con tan solo 7 años me quedé fascinado ante la pantalla después de haber visto Titanic. Y desde que la conseguí en VHS no paraba de reproducirla en mi aparato reproductor (de video). Para mí, James Cameron, un cineasta al que admiraba, ha caído en picado de los altares donde yo le puse en mi infancia. Solo me han bastado 3 horas de cine simple y plagiado para darme cuenta de que Avatar es solo la resaca de aquella noche de oscars donde se llevo 11 estatuillas por Titanic… James borracho de éxito se autoproclamo “El rey del mundo”. Esa prepotencia le llevó a hacer esta basura con la que se ha forrado… Mientras en Haití se mueren de hambre, con nuestro dinero y nuestras alabanzas hacia su “Trabajo” estamos llenando más y más su bolsillo lleno de egocentrismo y basura cinematográfica simple y comercial que esta acabando con el cine de verdad. Ese que en su día hicieron genios del séptimo arte como Charles Chaplin, Ingmar Bergman, Alfred Hitchcock, Stanley Kubrick, Federico Fellini o Woody Allen.
Cine real, profundo, humano... Y no una fantasía estupida con alienígenas azules y batallas épicas.
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